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La Fuerza Aérea de EE.UU. no van a comprar el arma hipersónica de respuesta rápida lanzada desde el aire, AGM-183A, tras los problemas surgidos durante las pruebas de disparo, según declaró el miércoles a los legisladores el jefe de adquisiciones de la entidad.

Sin embargo, el servicio aún finalizará los dos últimos vuelos de prueba del programa ARRW para recopilar datos que ayuden con futuros programas hipersónicos, aseguró Andrew Hunter al Subcomité de Fuerzas Tácticas Aéreas y Terrestres de la Cámara de Representantes en un testimonio escrito.

"Aunque la Fuerza Aérea no tienen intención de seguir adquiriendo los misiles ARRW una vez termine el programa de creación de prototipos, completar los vuelos de prueba es beneficioso para recopilar datos que ayudarán a informar futuros programas hipersónicos", escribió Hunter.

Hunter sentenció la muerte del programa ARRW de Lockheed Martin un día después de que el secretario de la Fuerza Aérea, Frank Kendall, dijera en otra audiencia que una prueba realizada en marzo había fracasado.

El viernes, la Fuerza Aérea dijo que había realizado un segundo lanzamiento de prueba de un prototipo ARRW plenamente operativo el 13 de marzo. Pero el servicio no describió la prueba como un éxito, sino que dijo que cumplió varios objetivos.

Kendall dijo el martes al panel de defensa del Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes que la prueba ARRW del 13 de marzo "no fue un éxito" y que el programa ha "tenido dificultades en su proceso de pruebas".

Kendall dijo el martes que la Fuerza Aérea todavía quiere llevar a cabo dos pruebas ARRW más con los prototipos restantes, pero dijo a los legisladores que la USAF está más comprometida con su otro gran programa de armas hipersónicas, el misil de crucero de ataque hipersónico.

Las armas hipersónicas pueden alcanzar velocidades superiores a Mach 5 y son muy maniobrables, lo que dificulta su seguimiento y derribo. China y Rusia han invertido considerables recursos en el desarrollo de estas armas para sus ejércitos, y varios legisladores estadounidenses han expresado su preocupación por que el país norteamericano no esté haciendo lo suficiente para desarrollar sus propias capacidades hipersónicas.
La Fuerza Aérea de EEUU abandona el misil hipersónico AGM-183A ARRW de Lockheed Martin tras varias pruebas fallidas