El Gobierno neerlandés aseguró estar dispuesto a estudiar con “una mente abierta” el posible suministro de aviones de combate F-16, así como una colaboración en la entrega de carros de combate Leopard 2 a Ucrania, si Kiev los solicita para reforzar su posición en la guerra contra Rusia.
El Ejecutivo neerlandés está dispuesto a pagar por los tanques Leopard 2 que se envíen junto a otros países a Ucrania, según el canal neerlandés RTL Nieuws, que recoge unas declaraciones del ministro de Exteriores, Wopke Hoekstra, quien aseguró en un debate parlamentario que estudiaría con “una mente abierta” un suministro de cazas F-16 a Kiev llegado el caso de que Ucrania los pida.
Además, agregó que “no hay tabúes” a la hora de suministrar equipos regulares a Ucrania durante la guerra iniciada tras la invasión rusa en febrero del año pasado, y recordó que Países Bajos solo envía a Kiev los artículos militares que el gobierno ucraniano solicita.
Los cazas en cuestión serían los F-16A/B MLU que la Real Fuerza Aérea de Países Bajos está reemplazando paulatinamente por los F-35A, cazas avanzados de quinta generación. Una docena de estos cazas fueron comprados por Draken US, una de las compañías privadas de entrenamiento agresor contratadas por la USAF para aumentar la preparación de sus pilotos.
Diputados del partido progresista D66 (uno de los cuatro socios de la actual coalición del gobierno) instaron al Gobierno neerlandés a suministrar los cazas y vehículos de combate de infantería a las Fuerzas Armadas ucranianas por temores a que Moscú lance otra gran ofensiva en los próximos meses.
Sin embargo, la entrega de los Leopard 2 es una cuestión delicada, puesto que Países Bajos no tiene esos tanques en propiedad, sino que se los “cede” Alemania, por lo que Berlin debe dar su permiso como fabricante de esos tanques para que otros países se los puedan suministra a Ucrania.
No es la primera vez que se habla de que estos aviones terminen ayudando al esfuerzo bélico ucraniano. En el pasado, el gobierno de Países Bajos evaluó traspasar algunos de sus excedentes de F-16 a un país aliado de la OTAN, para que éste a su vez ceda sus MiG-29 a Ucrania.
Entre los candidatos más probables para el “canje” figuraban Polonia (que ya opera versiones más avanzadas del F-16) y Eslovaquia, que había llegado a negociar con República Checa y Polonia para que se hicieran cargo de la defensa de su espacio aéreo, en el caso eventual de que se transfirieran los Fulcrum a Ucrania. Sin embargo, no hay indicios claros de que este escenario se haya concretado.
El gobierno ruso advirtió sobre las consecuencias del envío de armamento pesado como tanques o misiles de precisión de largo alcance (hasta 150 kilómetros), pues ello llevaría a una nueva escalada de la confrontación con consecuencias impredecibles, destacó aquí la prensa.
Además, en todo momento Moscú señala que cualquier armamento o medio de donde sea trasladado a Ucrania se convierte automáticamente en un objetivo legítimo de las fuerzas armadas rusas.
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| Países Bajos está dispuesto a considerar la entrega de aviones de combate F-16 a Ucrania |
