El gobierno belga contempla una expansión significativa de su flota de cazabombarderos F-35A, lo que podría elevar el número total de aeronaves de 34 a 55 unidades, según información publicada por el diario De Morgen. Esta decisión estratégica responde a la necesidad de cumplir con los compromisos operacionales adquiridos ante la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y fortalecer las capacidades aéreas de Bélgica en un contexto de creciente demanda en materia de defensa colectiva.
La adquisición inicial de 34 F-35A, realizada en 2018 al fabricante estadounidense Lockheed Martin por un valor de 3.800 millones de euros, ha resultado insuficiente para atender plenamente los requerimientos de la Fuerza Aérea belga. Por ello, el actual ministro de Defensa, Theo Francken, ha expresado su voluntad de incrementar la flota, a pesar de los debates en curso sobre la dependencia europea respecto a Estados Unidos en cuestiones de defensa.
El nuevo plan, que implicaría la compra de 21 aeronaves adicionales, representaría un aumento superior al 50 % del tamaño original de la flota. La inversión estimada para esta expansión asciende a 5.000 millones de euros, suma que también cubriría la actualización de software al estándar Block 4, el mantenimiento operacional de los sistemas y la participación de Bélgica en un proyecto europeo de gestión de datos del F-35.
La producción de estas nuevas aeronaves estaría prevista en la planta FACO (Final Assembly and Check Out) ubicada en Cameri, Italia, operada conjuntamente por Leonardo y Lockheed Martin. Esta instalación ha sido clave en el ensamblaje de unidades F-35 destinadas a países europeos, lo que podría posicionar esta adquisición dentro de una estrategia de cooperación industrial continental.
Además del aumento en la flota aérea, Bélgica proyecta una serie de inversiones en defensa que alcanzarían los 36.000 millones de euros hacia 2035. Entre las iniciativas más destacadas se incluyen la adquisición de diez baterías de defensa aérea, posiblemente bajo el sistema NASAMS, drones MQ-9B SkyGuardian adicionales, una tercera fragata, así como el fortalecimiento de la ciberdefensa y la posible creación de una segunda brigada motorizada.
Para financiar estos ambiciosos planes, el gobierno ha anunciado su intención de aumentar el gasto en defensa del 1,3 % al 2 % del PIB. Este esfuerzo presupuestal será posible mediante la creación de un fondo alimentado por dividendos de participaciones estatales en empresas estratégicas, la venta de activos no esenciales y la posible imposición de gravámenes sobre activos rusos congelados.
Con estas decisiones, Bélgica busca consolidarse como un actor comprometido dentro de la OTAN y responder eficazmente a los desafíos de seguridad emergentes en Europa y el mundo.
![]() |
Bélgica prevé incrementar su flota de F-35A como parte de su modernización militar |