El fabricante de aeronaves francés Dassault ha llegado a un acuerdo con Airbus e Indra que permite dar el paso a la siguiente fase del desarrollo de programa FCAS, el proyecto que están desarrollando conjuntamente España, Francia y Alemania para crear el nuevo sistema de combate aéreo europeo que incluye una gran cantidad de tecnologías disruptivas entre las que se destacan un avión de combate de sexta generación, drones de combate autónomos y gran conectividad entre las plataformas.
"Sí, hemos alcanzado un acuerdo con Airbus" para la creación del caza de nueva generación (NGF, por sus siglas en inglés), uno de los pilares del programa FCAS, según ha confirmado este jueves Eric Trappier, presidente y consejero delegado de Dassault en una entrevista concedida a 'Le Figaro'.
"Hemos sido confirmados en nuestro papel como contratista principal y arquitecto de la aeronave, y hemos obtenido protección para nuestros conocimientos y tecnologías industriales", ha incidido Trapier.
"Ser el arquitecto de un nuevo avión de combate es muy motivador para nuestra empresa, nuestros equipos, los de Airbus, nuestro socio principal, Indra y nuestros socios de larga data, Safran, Thales y MBDA. Por no hablar de nuestro ecosistema de subcontratistas, en los tres países, que formarán parte de la aventura… Por no hablar de todos los jóvenes que estaremos reclutando para trabajar con los experimentados, que estuvieron involucrados en la aventura de Rafale”, dijo Eric Trapier.
Desde Airbus también han celebrado que por fin se haya alcanzado un acuerdo para reactivar el proyecto. "Este acuerdo industrial global representa un gran paso adelante para este programa insignia de la defensa europea", ha señalado Mike Schoellhorn, consejero delegado de Airbus Defence and Space, en un comunicado.
Poco después de la publicación de la noticia, el ministro francés de Defensa, Sébastien Lecornu, celebró el acuerdo en la red social Twitter.
"Me congratula el acuerdo alcanzado entre los industriales sobre la próxima fase del proyecto SCAF. Este proyecto es una ilustración concreta de la cooperación que llevamos a cabo a nivel europeo sobre la defensa y el armamento, en la cual Francia juega un papel central", señaló.
Tras este importante avance, que está pendiente aún de que se firme el acuerdo a nivel político, se abre la siguiente etapa (denominada Fase 1B) en la creación del futuro caza de combate europeo, que contempla el desarrollo de diferentes demostradores de la nueva aeronave.
En concreto, los trabajos que se realicen en esta fase 1B permitirán la validación en vuelo de todo un conjunto de tecnologías de siguiente generación que se madurarán en el curso del proyecto. Según Dassault, los primeros demostradores podrían estar volando ya en 2029.
Indra fue la compañía elegida por el Gobierno español para encargarse de coordinar la participación de España en esta siguiente fase del programa FCAS, en la que la industria española tendrá un peso equivalente al de Alemania y Francia.
El desarrollo del FCAS es un proyecto político que lanzaron el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y la excanciller alemana Angela Merkel en 2017, pero que se encontraba en suspenso desde el verano de 2021 por las disputas que mantenían Airbus y Dassault.
Según Reuters, hay diferentes versiones sobre los motivos de este retraso. Algunas fuentes culparon a Dassault, que se había negado a ceder en una larga disputa sobre los derechos de propiedad intelectual, mientras que otras fuentes señalan a Airbus por presionar para obtener una mayor cuota de trabajo, insistiendo en que debería tener "igualdad de condiciones" con Dassault.
Este proyecto, que estaba al ralentí desde hace más de un año, supone el desarrollo de una aviación de combate de nueva generación, que incluye drones y sistemas electrónicos avanzados. En mayo de 2021, los tres países socios habían logrado un acuerdo para una nueva fase de desarrollo del SCAF con una inversión de unos 3.500 millones de euros durante el periodo 2021-2024.