La Fuerza Aérea Colombiana adquirió sistemas móviles anti-drones del fabricante francés CerbAir para proteger sus bases aéreas. La entrega del equipo contará con la tecnología que es capaz de escanear y bloquear el espectro de radiofrecuencia para proteger instalaciones críticas contra drones individuales y enjambres. No se proporcionaron números ni información sobre qué modelos y qué bases estarán protegidas por los sistemas CerbAir.
"América Latina es un mercado anti drones de maduración rápida que se enfrenta a ataques de drones o contrabando. Hay necesidades específicas: infraestructuras críticas, instalaciones petrolíferas y gasísticas y fuerzas policiales y militares que buscan soluciones móviles y portátile rentables. Resulta ser el posicionamiento estratégico de CerbAir. Por lo tanto, aprovechando nuestro primer contrato con la Fuerza Aérea Colombiana , tenemos la intención de aumentar nuestro enfoque en el área en colaboración con nuestro socio local" indicó Lucas Le Bell, CEO de CerbAir.
“Ofrecemos soluciones que permiten localizar tanto el dron como la ubicación del piloto”, añade Lebell, explicando que su empresa, que se formó hace siete años, actualiza constantemente sus productos para hacer frente a la amenaza en evolución, que está compuesta por drones con firma reducida, capaz de ataques de enjambre, algunos de ellos explotando incluso la inteligencia artificial.
En los últimos años la empresa ha obtenido numerosos contratos ampliando su base de datos de clientes, permitiéndole mejorar su conocimiento de las necesidades de los clientes, que son siempre el punto de partida de CerbAir. “Siempre tratamos de entender lo más posible cuáles son los riesgos y cuál es el presupuesto disponible, para proponer soluciones con el nivel adecuado de desempeño considerando una amenaza realista”, explica Lebell. Si esto es cierto para las aplicaciones de seguridad, cuando se cambia al mundo militar, la cobertura y la rentabilidad son los parámetros principales.
La especialidad de CerbAir es la detección, caracterización e identificación de drones explorando métodos de guerra electrónica, más específicamente análisis de espectro de radiofrecuencia (RF), que a su vez permite contrarrestar la amenaza con técnicas de interferencia inteligente que minimizan las interferencias con otras operaciones en el área.
CerbAir propone soluciones fijas, móviles y portátiles, las dos primeras basadas en su receptor Hydra RF que adquiere, digitaliza y analiza señales de RF en bruto en busca de aquellas firmas que indican un enlace entre un dron y su estación de control en tierra, en ambas direcciones.
El sistema estándar opera en las bandas de 2400-2500 MHz y 5725-5875 MHz, sin embargo como opción se pueden agregar bandas de onda más cortas, específicamente las de 433-435 MHz, 863-870 MHz y 902-928 MHz.
Un solo receptor tiene un rango de detección de más de 1 km y opera en los 360°, mientras que al juntar cuatro sistemas el rango se incrementa a más de 2 km y proporciona el azimut de la amenaza con una precisión de ± 10° a un rango de menos de 1 kilómetro. Cuando se utiliza en la versión móvil, el volumen reducido permite transportar fácilmente el equipo en un vehículo, desplegándolo dos operadores en menos de 20 minutos.
En cuanto a los efectores, para alcances más largos ha desarrollado Medusa, un sistema de interferencia que según la compañía proporciona “una respuesta adecuada y proporcionada a la amenaza”, sin que se disponga de más datos técnicos. Estos efectores bloquean la comunicación entre el dron y la estación de control, el dron cae a tierra si no está equipado con un sistema de retorno, o vuela de regreso a la ubicación del operador.
 |
| La Fuerza Aérea Colombiana adquirió sistemas antidrones de Cerbair para proteger sus bases aéreas. |
