En el dominio aéreo, mantener un alto nivel de conciencia situacional es uno de los factores más críticos. La conciencia situacional puede entenderse como la compresión del estado actual del entorno de vuelo y operación. Esta imagen integrada forma la característica organizativa central desde la cual se toman todas las decisiones. En la aviación de combate, la conciencia situacional juega un rol crucial en la ecuación para la supervivencia.
Es por esto que la empresa sueca Saab se ha esforzado en desarrollar la fusión de sensores avanzados del Gripen. Este caza, fusiona la información del radar AESA, del sistema de guerra electrónica, de pods de reconocimiento y seguimiento, del data link, IFF y de los sistemas de comunicaciones, para ofrecer conciencia situacional superior y soporte de decisión al piloto.
La potencia de cálculo en tiempo real del Gripen E integra datos complejos alimentados por múltiples sensores y sistemas, y los presenta al piloto a través de diferentes pantallas.
La principal es la pantalla panorámica Wide Area Display (WAD), un sistema inteligente, resistente a fallos, con respaldos redundantes para garantizar su confiabilidad aun en situaciones extremas. Dicha pantalla panorámica de alta resolución de 48x20 cm muestra una imagen continua a lo largo de toda su anchura. Muestra la información seleccionada por el piloto en cada fase del vuelo, por ejemplo, los datos operativos de navegación y combate, datos del escenario táctico en que opera el avión y datos de sus sistemas de armas. La información presentada puede cambiarse tocando la pantalla, presionando las teclas multifunción del panel o apretando los botones de la palanca de control y el mando de potencia, este último conocido como Hands on Throttle and Stick (HOTAS).
Encima de la pantalla panorámica, a la altura de los ojos del piloto, está el Head-up Display (HUD), en el que se muestran los datos de vuelo, rendimiento, campo visual y armas.
También está el casco Targo II, al que está sujeta una pantalla en la que se muestra la información del Head Mounted Display (HMD) y que además permite apuntar y disparar a los objetivos que el piloto está mirando, sin necesidad de dirigir el avión hacia la amenaza para usar el armamento.
Toda la arquitectura e interfaz del Gripen se desarrolló a partir de la premisa de que el piloto era la pieza clave de la operación del caza. La ergonomía, la simbología de la información y la forma en que se le comunica al piloto le permiten tomar decisiones asertivas en fracciones de segundo.
El campo de batalla es cada vez más demandante; los aviones de combate tendrán la necesidad de analizar volúmenes de datos cada vez más amplios y facilitar una conciencia situacional superior al piloto, será un requerimiento de base para los cazas.
El Gripen de Saab es uno de los cazas que se le están ofreciendo a la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) en el marco del proyecto de renovación de su flota de aviones de combate.
