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Una flota de 22 helicópteros UH-60A Black Hawk entregados en comodato a la Policía Nacional de Colombia por los Estados Unidos dejarán de realizar operaciones antinarcóticos en el territorio nacional por tiempo indeterminado debido a una orden ejecutiva del gobierno de Donald Trump.

La decisión fue comunicada por la embajada de Estados Unidos en Colombia, que entregó la orden expresa de no operar las aeronaves desde las 00:00 horas del lunes 27 de enero.

Fuentes policiales indicaron que esta decisión se tomó antes de la crisis diplomática que se presentó entre Colombia y Estados Unidos, luego de que la Casa de Nariño no autorizara el aterrizaje de aviones con ciudadanos colombianos deportados desde el país norteamericano.

La información conocida hasta ahora señala que la oficina diplomática de ese país informó de la congelación del contrato con la empresa de mantenimiento de las aeronaves y, posiblemente, hace parte de las medidas de Estados Unidos para reestructurar la entrega de ayudas internacionales, que incluye la circular en la que informó de suspensión de fondos por un plazo de 90 días.

Sin embargo, otras fuentes estadounidenses también insinuaron que la decisión podría tratarse de una represalia por el reciente enfrentamiento entre los mandatarios de ambos países, pese a que se comunicó que la crisis está superada.

“Si bien EE.UU. tiene su firme compromiso de seguir fortaleciendo su relación con Colombia para promover interés mutuos, no vacilaremos”, aseguró el Departamento de Estado de Estados Unidos refiriéndose al tema.

El gobierno norteamericano también recordó la cooperación que deben tener las naciones aliadas, incluida Colombia, para apoyar con la política de migración que está implementado ese país y que incluye la deportación de nacionales colombianos, el principal motivo de discordia entre Petro y Trump.

“El presidente Trump espera que todas las naciones cooperen en la aceptación de los deportados que se encuentran ilegalmente en los Estados Unidos”, informó la entidad.

La drástica decisión tomada por el Departamento de Estado de los Estados Unidos se suma a la reciente suspensión de fondos para el financiamiento de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).

La medida también responde a una orden ejecutiva emitida por el expresidente Donald Trump, que exige una revisión de 90 días de varios programas de cooperación internacional. Este recorte representa un desfinanciamiento cercano a los 15.000 millones de pesos.

Actualmente la Policía Nacional de Colombia posee 34 Black Hawk, mientras que esperaba la entrega de otros dos de un lote donado por Estados Unidos con entregas que se iniciaron en 2022. Los restantes 12 helicópteros de la flota no se verían afectados, ya que su mantenimiento corre por cuenta de la fuerza.  
La medida también podría afectar a aparatos del Ejército Nacional de Colombia, cuyo mantenimiento también cuenta con el apoyo de Estados Unidos

Luego de esta decisión, la Policía hizo un balance de las afectaciones frente al apoyo militar. Aseguró que la operación aérea se mantendrá con 14 de los 64 helicópteros con los que contaba la institución, entre ellos, solo cuatro de los 22 Black Hawk que 'prestaba' el gobierno norteamericano.

A través de un comunicado, explicó que el 25 de enero recibió la notificación sobre la "decisión del gobierno de Estados Unidos de revisar durante 90 días los programas de asistencia extranjera". Esta determinación fue tomada por Donald Trump al llegar a la Casa Blanca y fue comunicada por correo electrónico a todas las embajadas de los países beneficiarios de los fondos de cooperación internacional transferidos por Estados Unidos.

Durante este periodo, cada país deberá entregar un listado de los programas financiados con los fondos estadounidenses, y el Departamento de Estado realizará un filtro para determinar cuáles están más alineados con las nuevas políticas y, por lo tanto, seguirán recibiendo la ayuda.

La Policía afirmó que "en aplicación de esta medida", la operación aérea de la Policía Nacional con helicópteros Black Hawk UH60 se mantendrá con 14 de estas aeronaves: 10 propias y cuatro del programa de cooperación con EE. UU.

Sin embargo, el golpe a las tareas de seguridad que ofrecía la flota aérea de la Policía es significativo. 22 helicópteros Black Hawk estadounidenses, utilizados para transporte de tropas, operaciones de combate y labores humanitarias como la extinción de incendios, quedarán en tierra.

Estas aeronaves fueron asignadas como un 'préstamo' para las labores de seguridad del país: Washington se encargaba del mantenimiento y la gasolina, mientras que el gobierno colombiano proporcionaba los pilotos. Además de los Black Hawk, existen otras aeronaves como El Halcón, pero la medida solo aplicará para los primeros.

Según fuentes de la Fuerza Pública, el anuncio agudizaría la crisis y escasez de aeronaves para desarrollar tareas vitales como mando y control y despliegue tropas en zonas críticas.
Por orden de Estados Unidos, la Policía de Colombia dejará de operar 22 helicópteros UH-60A Black Hawk
Por orden de Estados Unidos, la Policía de Colombia dejará de operar 22 helicópteros UH-60A Black Hawk
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