En un día oscuro para Colombia, este 17 de noviembre dos regiones distintas fueron escenario de ataques mortales perpetrados por terroristas de las FARC, según revelaron fuentes militares.
El primero de ellos sucedió en la vereda Munchique, zona rural de Santander de Quilichao, norte del Cauca, donde tropas del Batallón de Operaciones Terrestres N.° 12 fueron emboscadas por terroristas de las FARC mientras llevaban a cabo operaciones de seguridad y estabilidad.
El resultado fue la trágica pérdida del soldado profesional José Willian Sánchez Poveda, oriundo de Murillo, Tolima, con 13 años de servicio.
Las autoridades judiciales están llevando a cabo investigaciones para esclarecer las circunstancias de este brutal ataque. El Comando militar condenó enérgicamente esta acción de terror, catalogándola como una violación flagrante de los derechos humanos y una amenaza directa a la paz en la región.
El grupo armado responsable de este ataque fue la organización terrorista FARC, en su vertiente residual Dagoberto Ramos Ortiz.
En un segundo ataque terrorista, en el área general de la vereda Puerto Rico, municipio de Anorí, Antioquia, una unidad militar fue blanco de un atentado terrorista durante operaciones de estabilidad. La detonación, producto de un explosivo instalado en una retroexcavadora, cobró las vidas de los soldados profesionales Dúber Andrés Loperena Montero y Andrey Mayorga Coronel.
Este acto de barbarie se atribuye a las FARC, específicamente a la estructura delincuencial GAO-r 36, al mando de alias Primo Gay, según informes de inteligencia.
A pesar de estos dolorosos episodios, las operaciones militares en la región se mantendrán, cumpliendo estrictamente con la misión constitucional de proteger la vida y la integridad de los habitantes locales, mientras el país se enfrenta a la persistente amenaza terrorista de las FARC.
El terrorismo de las FARC sacude a Colombia y deja tres soldados asesinados en Cauca y Antioquia |