El Consejo de Ministros autorizó este martes la celebración del contrato para el suministro de 168 sistemas de misiles contra carro Spike LR2.
El Spike LR2 es un sistema de lanzamiento de misiles de quinta generación, con guiado electroóptico y basado en una unidad de medición inercial (IMU), que le permite un nuevo modo de lanzamiento, denominado ‘Auto’, que facilita el guiado intermedio del misil a coordenadas, según detalla el Ejército de Tierra en la Memorial de Infantería Española.
El sistema ha ido evolucionando a lo largo de los últimos años, de tal forma que hoy día cuenta con nueva dirección de tiro, una cámara térmica y un sistema de adquisición de objetivos.
El sistema Spike LR2 es eficaz contra varios tipos de blancos (con cargas HEAT/MP) en alcances de 200 a 5500 metros de día, de noche o en condiciones de visibilidad reducida, con un explosivo mejorado, que permite la penetración de 950 mm en blindaje ERA y con la posibilidad de lanzamiento con tres trayectorias (Alta, Media o Baja), permitiendo ángulos de ataque de hasta 70º, con un perfil «Top Attack».
Gracias a sus miras de observación diurna y nocturna de alta calidad, y a su capacidad de adquisición de blancos, el sistema SPIKE LR2 se puede emplear para misiones de reconocimiento y de obtención de información, pudiendo emplazar la iCLU directamente sobre el trípode, sin necesidad de colocar el misil previamente.
Según el ejecutivo, la obsolescencia de los sistemas utilizados hasta el momento (Milan, TOW-LWL y M47 Dragon) hace que deban ser reemplazados por otros más modernos como los que ya se encuentran en servicio en muchos de los ejércitos de los aliados de la OTAN.
Esta adquisición permitirá la interoperabilidad de sistemas y la reducción del coste del ciclo de vida de los mismos. El valor estimado del contrato es de 285.070.127 euros.
Por otra parte, se ha autorizado la celebración del contrato para adquisición de un sistema pesado de apertura de brechas por 13.200.000 euros.
Las unidades de zapadores del Ejército de Tierra son las responsables de la apertura de brechas y el levantamiento de campos de minas, lo que permite proteger la seguridad de los desplazamientos, señaló el Gobierno.
Para ello, el Ejército de Tierra dispone de mangueras explosivas de guerra tanto ligeras como pesadas, pero ahora el Ejecutivo considera “necesario adquirir la versión de instrucción, para asegurar un adiestramiento eficaz en territorio nacional, antes de su utilización en zona de operaciones”.
El Gobierno ha autorizado también un acuerdo marco para adquirir munición de artillería de campaña de 155 milímetros (obuses/cañones) por más de 150 millones de euros. En este caso, Defensa alega los “compromisos internacionales” porque España como país miembro de la OTAN debe tener a disposición de la NATO Reaction Force (NRF) una unidad de obuses de calibre 155 mm, “para ser proyectada a cualquiera de los escenarios de operaciones en la que se encuentre desplegada, así como para participar al nivel de agrupación táctica”.
Las referencias del Consejo de Ministros también recogen la compra de granadas de mortero de 60 milímetros, 81 milímetros y 120 milímetros por de 96 millones de euros, munición empleada por las diferentes unidades del Ejército en ejercicios tácticos en territorio nacional y en zonas de operaciones. Una adquisición necesaria, según el Gobierno porque “se observa un consumo recurrente de este tipo de munición, lo que aconseja acudir a la figura del acuerdo marco como mejor vía de obtención”. En este caso, es programa de compra durará hasta 2025, con posibilidad de prórroga por un periodo máximo de dos años más.
Además, Defensa se hará también con repuestos de vehículos IVECO del Ejército de Tierra por un valor de 29,7 millones, con el objetivo de mantener operativa la flota de camiones, ambulancias y vehículos polivalentes ligeros.
España adquiere sistemas de misiles antitanque Rafael Spike LR2 por 285 millones de Euros |