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El Ministerio de Hacienda y Crédito Público ha emitido un pronunciamiento acerca del programa denominado "Jóvenes en Paz". Esta iniciativa tiene como propósito otorgar un subsidio de un millón de pesos a jóvenes con el objetivo de alejarlos de las actividades delictivas asociadas a bandas criminales. En palabras del presidente Gustavo Petro, “les vamos a pagar por no matar”.

El Ministerio ha dado su aprobación a esta propuesta que será llevada adelante por el Ministerio de la Igualdad, bajo la dirección de la vicepresidenta Francia Márquez. Este constituiría el primer decreto que la vicepresidenta firme en su papel de ministra, y en él se establecen los requisitos de ingreso, las condiciones de permanencia y las circunstancias que podrían llevar a la exclusión de los 100.000 jóvenes que se verán beneficiados por este programa.

No obstante, la controvertida iniciativa del mandatario no solamente implica un gasto significativo para la nación, destinado a intentar pacificar las zonas más conflictivas y afectadas por los enfrentamientos entre grupos armados, sino que además otorgará subsidios a individuos vinculados con actividades delictivas.

De acuerdo con el decreto propuesto, el Gobierno asumirá la responsabilidad de "patrocinar" a 100.000 jóvenes que se encuentran involucrados en grupos armados u organizaciones criminales, y les proporcionará una compensación cercana a un millón de pesos a cambio de que abandonen sus actividades ilícitas.

En relación con el artículo 43, que trata sobre la cuantía y el periodo de las transferencias monetarias condicionadas, el Ministerio de Hacienda reveló en un comunicado emitido por Blu Radio que la meta es atender a 100.000 jóvenes mediante transferencias, lo que supondría un costo total de 1,2 billones de pesos por las 12 transferencias. Es relevante destacar que estos cálculos únicamente abarcan el aspecto monetario de las transferencias, sin incluir otros posibles costos.

El proyecto de decreto, cuya versión preliminar ya había sido divulgada, establece todas las condiciones del programa. Por ejemplo, se determina quiénes son los jóvenes elegibles y cuál es el propósito del programa mismo.

El decreto señala la necesidad de implementar mecanismos que desvinculen a los jóvenes de las actividades delictivas, rompan los ciclos de violencia en las comunidades más vulnerables y fomenten su integración en ámbitos educativos, laborales y sociales, así como el desarrollo de sus habilidades y aptitudes individuales.

El acceso al programa Jóvenes en Paz se limita a individuos de entre 14 y 28 años que se encuentren en situación de vulnerabilidad o pobreza extrema, que residan en áreas rurales y sean víctimas de explotación sexual, o que estén vinculados o en riesgo de involucrarse en actividades delictivas.

Es importante resaltar que aquellos jóvenes con órdenes de captura o búsqueda por parte de las autoridades judiciales, así como aquellos que estén cumpliendo sanciones privativas de libertad o que sean beneficiarios de otros programas, no serán admitidos en el programa Jóvenes en Paz.

El programa también establece las condiciones para la integración de los jóvenes en rutas educativas, laborales, de servicio social y emprendimiento, con el fin de continuar recibiendo el apoyo económico. Finalmente, se incluye un componente de atención integral en salud mental.
Gobierno Petro regalará 1.2 billones de pesos a criminales "para no matar"... Usted, siga pagando impuestos
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