Corea del Norte disparó un misil balístico de alcance intermedio que sobrevoló Japón y llevó a este país a activar su sistema de alarma y a urgir a su población a refugiarse.
La última vez que Pyongyang disparó un misil por encima de Japón fue en 2017, en medio de un periodo de alta tensión entre el dirigente norcoreano Kim Jong Un y el entonces presidente estadounidense Donald Trump.
El ejército surcoreano indicó que había "detectado un presunto misil balístico de alcance intermedio que fue lanzado desde la zona de Mupyong-ri en la provincia de Jagang sobre las 7H23 (22H23 GMT del lunes) y pasó por encima de Japón en dirección este".
En un comunicado posterior precisó que el proyectil voló 4.500 kilómetros hasta una altitud de 970 kilómetros y alcanzó una velocidad de Mach 17, lo que equivale a 17 veces la velocidad del sonido.
El presidente surcoreano Yoon Suk-yeol denunció "una provocación" que viola las regulaciones de Naciones Unidos y abogó por "una respuesta firme y por tomar medidas correspondientes en cooperación con Estados Unidos y con la comunidad internacional".
Tokio también informó del disparo del misil por parte de Pyongyang y lanzó una alerta de evacuación en dos regiones septentrionales para que sus habitantes se refugiaran dentro de edificios o bajo tierra.
"Se cree que un misil balístico ha pasado por encima de nuestro país y ha caído en el océano Pacífico. Este es un acto de violencia después de recientes disparos repetidos de misiles balísticos. Lo condenamos vigorosamente", dijo el primer ministro Fumio Kishida.
El ministro de Defensa, Yasukazu Hamada, dijo que Corea del Norte "ha disparado en el pasado misiles del tipo Hwasong 12 cuatro veces, con lo que esto puede ser el mismo tipo". De confirmarse, la distancia de vuelo que Tokio estimó en 4.600 km, sería un récord para este tipo de proyectil, dijo el ministro.
El comando estadounidense del Indo-Pacífico condenó el lanzamiento norcoreano y reafirmó su compromiso con la defensa de Japón y Corea del Sur. "Estados Unidos condena estas acciones y llama a (Corea del Norte) a abstenerse de más actos ilegales y desestabilizadores", indicó en un comunicado emitido el lunes.
Igualmente, la Casa Blanca anunció que el asesor de seguridad nacional Jake Sullivan conversó por separado con sus pares de Japón y Corea del Sur sobre el misil. "En ambas llamadas, el consejero de seguridad nacional consultó sobre las respuestas conjuntas apropiadas y robustas", comentó la portavoz de seguridad nacional, Adrienne Watson, en un comunicado.
La del martes fue la quinta ronda de pruebas armamentísticas norcoreanas en los últimos 10 días, en lo que se ha visto como una aparente respuesta a los ejercicios militares conjuntos entre Seúl y Washington y otros entrenamientos entre aliados, entre ellos Japón, la semana pasada.
Los misiles lanzados durante las cuatro rondas previas fueron de corto alcance y cayeron en aguas entre la península de Corea y Japón. Esos proyectiles podrían golpear objetivos en Corea del Sur.
Corea del Norte ha lanzado alrededor de 40 misiles durante sus cerca de 20 ensayos en lo que va del año. El líder norcoreano, Kim Jong Un, promete expandir su arsenal nuclear y se niega a regresar a la diplomacia nuclear con Estados Unidos.
Algunos expertos extranjeros afirman que, con el tiempo, Kim regresará al diálogo y tratará de usar su agrandado arsenal para presionar a Washington para que acepte a su nación como un Estado nuclear, un reconocimiento que considera necesario para lograr la retirada de las sanciones internacionales y obtener otras concesiones.
Corea del Norte disparó un misil balístico de alcance intermedio en dirección a Japón. |