El gobierno de Taiwán firmó formalmente un acuerdo con la compañía estadounidense Lockheed Martin para comprar 66 aviones de combate F-16V, lo que aumentó aún más las tensiones en el Estrecho de Taiwán y se produjo solo dos días después del Ejército Popular de Liberación de China (EPL) anunció ejercicios a gran escala en respuesta a las provocaciones de Estados Unidos y las actividades secesionistas de Taiwán.
Si bien el acuerdo fue aprobado por la administración Trump el año pasado y se esperaba que se llevara a cabo una firma formal tarde o temprano, se cree que su anuncio en este momento en particular es otro desafío estadounidense al gigante asiático.
Un anuncio del Pentágono aseguró que Lockheed Martin recibió un contrato de $62 mil millones y 10 años para la producción de cazabombarderos F-16 destinados a ventas militares al extranjero con un pedido inicial de 90 aviones.
El Pentágono no reveló a los compradores de los aviones de combate, pero varios medios de comunicación, incluidos Bloomberg y AFP, informaron el viernes que el acuerdo incluye la compra aprobada para Taiwán de 66 cazas F-16.
El acuerdo involucraría 66 del F-16V, la última versión de este avión de combate, con un costo de 8 mil millones de dólares, según los informes cuando el acuerdo fue aprobado inicialmente.
China considera Taiwán como parte de su territorio. La isla es gobernada por un régimen rival que se refugió allí tras el acceso al poder de los comunistas en el continente en 1949, a raíz de la guerra civil china.
Por su parte, Washington, que rompió en 1979 sus relaciones diplomáticas con Taipéi para reconocer a Pekín como único representante de China, sigue siendo el aliado más poderoso de la isla y su principal proveedor de armas.
El anuncio de la venta llega además dos días después de la visita en Taiwán de un alto funcionario estadounidense, que provocó la ira de Pekín, en un contexto de crecientes tensiones entre Estados Unidos y China.
