Rouss, uno de los caninos paracaidistas de la Fuerza Aérea Colombiana. |
(www.webinfomil.com // Prensa Mindefensa) - Rouss, paracaidista de salto libre al servicio de la Fuerza Aérea Colombiana desde junio de este año, es una pastor belga malinois de 58 centímetros de altura y 30 kilos de peso, entrenada desde pequeña para realizar saltos al vacío desde aviones y helicópteros en cumplimiento de misiones de búsqueda y rescate aéreo.
Serena, dulce, elegante y obediente por naturaleza, esta vez Rouss se lanzó al vacío en compañía del técnico subjefe del Escuadrón de Comandos Especiales Aéreos, -ECOEA-, Carlos Piñeros, para posarse, finalmente, sobre la rampa del aeropuerto José María Córdova, en el marco de la F-AIR COLOMBIA 2015.
“Rouss ha pasado por un largo y riguroso proceso de formación física y sicológica, al final del cual ha aprobado en forma satisfactoria todas las pruebas en diferentes situaciones”, destaca el Suboficial.
En su presentación durante F-AIR COLOMBIA 2015 el pasado fin de semana, Rouss saltó con un arnés especialmente fabricado y certificado para paracaidismo, protección en la cabeza y los ojos y todos los anclajes de seguridad para garantizar su seguridad e integridad, explicó Piñeros.
Rouss se jubilará cuando cumpla 10 años de servicio.
Entonces, la pastor belga pasará a disfrutar de un merecido retiro en un hogar de adopción, habitualmente el de su guía o de otro miembro del equipo de paracaidistas rescatistas de la Fuerza Aérea Colombiana.
Entrenamiento
El subteniente Wilmer Andrés Díaz, de la Fuerza Aérea Colombiana, explicó cómo es el proceso de entrenamiento de los perros que colaboran con la institución en diferentes actividades.
“Desde hace un tiempo la Fuerza Aérea cuenta con unos semovientes encargados de localizar a personas que han sido víctimas de diferentes desastres y han recibido información desde que son cachorros”, dijo.
El uniformado señaló que incluso parte de estos animales han participado en operaciones de rescate en terremotos como el de Haití en el 2010 y que en ese entrenamiento no se maltrata al animal.
“En el proceso de crianza hay un proceso de formación psicológica para él. El perro aprende a caminar sobre el agua, a caminar sobre texturas rugosas, filosas, pasto, etc. Tenemos un lugar de crianza específico para eso y el animal aprende a sortear diferentes situaciones”, aclaró.
Además, dijo que en entrenamientos como paracaidista el animal cuenta con los implementos necesarios para evitar que el perro se cause daño.
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