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El ministro de Defensa del régimen de Nicolás Maduro, Vladimir Padrino López, aseguró el pasado viernes que el gobierno de Estados Unidos ha incrementado sus misiones de espionaje electrónico o “exploración radioeléctrica” contra Venezuela en un 800%

El régimen chavista realizó esta renuncia luego que el país norteamericano incrementara de forma alarmante sus actividades de Inteligencia cerca de las fronteras del país sudamericano al tiempo que ha generado un escándalo en torno a la cooperación militar entre Caracas y Moscú.

“Ese escándalo no se escucha cuando aterrizan aviones de los Estados Unidos en Cúcuta o cuando se ha incrementado un 800% la exploración radioelectrónica de la Fuerza Aérea Norteamericana alrededor de nuestro territorio. Nadie dice ¡NADA! cuando se pretende violar la soberanía de Venezuela, nuestras relaciones multicéntricas y pluripolares con el mundo están basadas en el respeto; reafirmando a su vez nuestra soberanía y derecho de incrementar los niveles de apresto operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana para defender nuestra independencia”, declaró Padrino López.

Cabe recordar que la Fuerza Aérea de los Estados Unidos ha desplegado de manera regular en las últimas semanas al espacio aéreo internacional muy cerca a las costas de Venezuela varios de sus sofisticados aviones de reconocimiento estratégico Boeing RC-135W "Rivet Joint" que está siguiendo muy atentamente todos los movimientos y despliegues de las fuerzas armadas del régimen de Nicolás Maduro.

Las aeronaves han volado diariamente en un patrón de vigilancia que las lleva desde el Aeropuerto Internacional Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín ubicado en la ciudad de San Juan de Puerto Rico -lugar donde se encuentra desplegadas de manera temporal- hasta una zona del Mar Caribe muy cerca del territorio venezolano, donde efectúan vuelos de más de 10 horas de duración paralelos a la línea costera y en los cuales son regularmente apoyados por aviones de reabastecimiento aéreo KC-10 Extender y KC-135 Stratotanker que vuelan desde la Base Aérea de MacDill en la Florida.



Estos avanzados y modernos aviones vuelan hasta Sudamérica con el único fin de monitorear a la cúpula chavista y a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana. Por lo general, Estados Unidos despliega los RC-135V para realizar misiones de inteligencia a países sobre los cuales tiene un gran interés estratégico; volando muy cerca de sus fronteras y recabando todo tipo de información que va desde el despliegue de las Fuerzas Armadas, información de los radares y defensas antiaéreas, hasta la interceptación de comunicaciones entre los líderes políticos y militares.

Los aviones RC-135 "Rivet Joint" han sido rastreados gracias a expertos que emplean fuentes abiertas y programas que registran la posición de las aeronaves por medio del sistema de transponder ADS-B. Por ejemplo entre el pasado 12 y 17 de marzo el RC-135V de matrícula 63-9792 y callsign SNOWY06 fue rastrado realizando un vuelo cerca de los estados de Sucre, Anzoátegui y Nueva Esparta. Este 21 de marzo fue rastreado otro avión de este tipo frente a las costas del estado Falcón y muy cerca de las islas de Aruba, Curazao y Bonaire, pero con la particularidad que estuvo empleando códigos de transponder falsos, tratando de enmascarar su verdadera identidad.

Sobre el RC-135 "Rivet Joint"

El RC-135V/W es la plataforma de inteligencia de señales estándar de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos. Su conjunto de sensores le permite al equipo de la misión detectar, identificar y geolocalizar señales en todo el espectro electromagnético; el equipo de la misión puede enviar la información recopilada en una variedad de formatos a una amplia gama de agencias a través de la extensa suite de comunicaciones. 

La tripulación está compuesta por los pilotos, los oficiales de guerra electrónica, los operadores de inteligencia y el personal de mantenimiento de sistemas aéreos. Todas las modificaciones de los sistemas de misión y la estructura de la aeronave fueron realizadas por L-3 Communications en Greenville, Texas, bajo la supervisión del Comando de Material de la Fuerza Aérea. 

Todos los RC-135 están asignados al Comando de Combate Aéreo, son operados por el Ala 55 y están destacados de manera permanente en la Base de la Fuerza Aérea Offutt, Nebraska, aunque es común que sean desplegados en distintos teatros de operaciones en todo el mundo.

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