Full width home advertisement

Destacado

Industria

Mundo

Colombia

Latinoamérica

Post Page Advertisement [Top]

Una preocupante e intranquilizadora alerta ha lanzado la Fuerza Aérea Colombiana este miércoles 17 de mayo, al asegurar que solo tiene recursos para operar hasta el próximo 31 de Julio. La inquietante advertencia fue informada por el General Carlos Silva, Segundo Comandante de la institución durante una presentación a la Comisión Cuarta de la Cámara de Representantes, donde la Fuerza Aérea Colombiana pidió más presupuesto para garantizar su operación en defensa de la seguridad y soberanía del territorio colombiano.

El alto oficial aseguró que el presupuesto de la Fuerza Aérea se ha visto afectado por factores como la inflación, los altos costos del combustible y la escasez de piezas tecnológicas, lo que ha llevado a una reducción en el número de horas de vuelo que la Fuerza Aérea desde el año 2021.

Según el General Silva, para el 2023 se les asignó solamente un 62,4% de los recursos necesarios para poder operar durante todo el año, lo que se ha traducido en una reducción del 26% en el número total de horas proyectadas para volar en 2023, pasando de 49.320 horas de vuelo ejecutadas en 2022 a sólo 36.550 para 2023 (de 54.000 originalmente proyectadas) y frente a unas 60.529 voladas en el 2020, lo que indica una drástica reducción en la operatividad y disponibilidad de la FAC.

A pesar de los esfuerzos por reducir su numero de integrantes y volverse más tecnológicamente eficientes, el presupuesto para el personal ha aumentado debido a la inflación, lo que deja menos dinero para gastos funcionales como el mantenimiento de aeronaves y el combustible. 

El alto oficial destacó que la mayoría de los bienes y servicios para la Fuerza Aérea se compran en dólares, lo que los hace sujetos al tipo de cambio del mercado, disminuyendo aún más el poder adquisitivo de la institución que para el 2023 se situó en 88 millones de dólares, que es una escandalosa reducción si se compara con el presupuesto asignado para ese mismo rubro hace 10 años, donde era de más de 268 millones de dólares.

La Fuerza Aérea Colombiana también explicó los desafíos que enfrenta en el mantenimiento de su flota de 408 aeronaves. Debido a restricciones presupuestarias, muchos de los aviones y helicópteros no pueden volar debido a problemas de mantenimiento, lo que resulta en un ciclo vicioso donde una gran cantidad de aviones quedan en tierra canibalizados para suministrar piezas a los aviones que aún están en operación.

"Los factores que impactan los costos de operar nuestra máquinas son: La tasa de cambio tras sufrir una devaluación del 164% en 10 años, el precio de los combustibles (el año pasado en enero el combustible valía cerca de ocho mil pesos un galón, para diciembre ese mismo galón vale 23 mil pesos) o sea se incrementó casi tres veces y la inflación total de Colombia que en los últimos diez años ha sido el 68%. Entonces nuestro poder adquisitivo se ha reducido notablemente y el crecimiento de nuestro presupuesto crece pero por debajo del IPC de tal manera que hace que las matemáticas al final no funcionen" destacó Silva Rueda.

"¿Cuál es la solución que toma la Fuerza Aérea? Un avión entra a mantenimiento, y si no hay recursos para ese repuesto entonces el avión se queda quietico esperando a que haya recursos, y si otro avión se me daña entonces, como no tengo recursos para eso, me toca quitarle la pieza a uno de los aviones que tengo quietos y ponérsela. Eso se llama remoción controlada hay otro término molesto que lo llamamos "canibalizar un avión". Eso lo que hace es que nos mantiene más tiempo en un hangar un avión con pocas posibilidades de poderlo sacar a operar" advirtió el Segundo Comandante de la Fuerza Aérea Colombiana.

"En el año 2012 volamos 92.000 horas, este año vamos a volar tal vez la tercera parte y sin embargo procuramos cumplir la misión. Por eso nos toca buscar cuáles son las las prioridades todo esto basado en unos en unos presupuestos. Aquí hay que resaltar que estamos ya volando por debajo del presupuesto que se nos asigna precisamente por por estos temas de mantenimiento" advirtió el General.

"La fuerza aérea colombiana en este momento tiene cerca de 408 aeronaves, de los cuales ahora mismo tenemos 91 aviones en tierra que en este momento no pueden volar debido a un tema de mantenimiento, que requiere un proceso un repuesto o una inspección, para la que no hay presupuesto" advirtió el General Silva. "Como están en tierra aprovechamos y le sacamos piezas para que los que están volando puedan seguir volando, pero este es un fenómeno que se convierte en una bola de nieve y vamos a llegar a tener más aviones en tierra que los que podemos estar volando".

El General explicó que el presupuesto que requiere la FAC para que todos sus aviones estén volando y operando normalmente durante el 2023 es de 2933 millones de pesos, pero que la Fuerza Aérea solo recibió 1800 millones de pesos, lo cual da un déficit de 1.100 millones de pesos distribuido tanto en en gastos de funcionamiento, como gastos de inversión.


El General Silva también detalló con precisión el problema con el combustible: "Para volar esas 54.000 mil horas que planeamos volar este año, se necesitarían ocho millones de galones, que al precio proyectado son 182 mil millones de pesos. El presupuesto asignado para 2023 es de 125.000 millones entonces alcanza solamente para los próximos 76 días (es decir hasta el 31 de julio). Tenemos un déficit de 57 mil millones, el 31 de Julio tendríamos que parar las aeronaves". 

"¿Qué estamos haciendo? Desde ya estamos recortando todos esos vuelos que de pronto no son tan importantes, son medidas que nos toca tomar, similares a las de quitarle un repuesto a un avión para que otro vuele. Entonces quizá esto se pueda extender en detrimento del cumplimiento de la misión que tiene Nuestra fuerza aérea colombiana".

Entre las recomendaciones del Segundo Comandante de la Fuerza Aérea Colombiana para paliar esta crítica situación se destacan: La asignación de recursos deficitarios en la vigencia actual mediante una adición presupuestal para que la FAC no pierda capacidades; la realización de una nivelación de la asignación del presupuesto, es decir que la FAC pueda tener el presupuesto que dejó de recibir en periodos anteriores con el fin de evitar ese aumento de aeronaves inoperativas; que el incremento del presupuesto sea acorde al IPC, con el fin de mantener la capacidad operativa de acuerdo a la capacidad adquisitiva del peso; exenciones del IVA en la adquisición de bienes y servicios; un acuerdo marco de precios de combustible y la exención del impuesto predial en las unidades militares aéreas.
La Fuerza Aérea Colombiana en crisis operativa, sin dinero para combustible y las horas de vuelo caen en picada