Tanto Corea del Norte como Corea del Sur probaron misiles balísticos el miércoles, aumentando las tensiones exponencialmente en lo que ya era una de las regiones más volátiles del planeta.
Pyongyang disparó los primeros misiles el miércoles, enviando dos de ellos a las aguas de la costa este de la península de Corea con cinco minutos de diferencia, según aseguró la Guardia Costera de Japón. El primer ministro del país nipón, Yoshihide Suga, calificó los lanzamientos de Corea del Norte como "escandalosos" y agregó que "amenazan la paz y la seguridad de nuestro país y región".
El Ministerio de Defensa de Corea del Sur dijo que los misiles norcoreanos cubrieron una distancia de unos 800 kilómetros y alcanzaron una altura de 60 kilómetros.
El Comando Indo-Pacífico del Ejército de Estados Unidos afirmó que la prueba norcoreana no representaba ninguna "amenaza inmediata" para Estados Unidos o sus aliados, pero aseguró que el lanzamiento "destaca el impacto desestabilizador del programa de armas ilícitas de Corea del Norte".
Las pruebas de misiles balísticos del miércoles son las primeras que efectúa Pyongyang desde que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, asumió el cargo en enero y se producen pocos días después de que el régimen comunista dijera que probó misiles de crucero de largo alcance.
Corea del Norte tiene prohibido probar misiles balísticos y armas nucleares según el derecho internacional. Pruebas anteriores de este tipo se han enfrentado a condenas de la comunidad internacional y las sanciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Los misiles de crucero son propulsados por motores a reacción. Al igual que un avión, permanecen más cerca del suelo, lo que los hace más difíciles de detectar. La mayoría de los misiles de crucero no están diseñados para transportar ojivas nucleares.
En comparación, los misiles balísticos funcionan solo durante una pequeña parte de su vuelo. Se disparan en una trayectoria parabólica que en versiones de mayor alcance llegan fuera de la atmósfera de la Tierra, y pueden manejar cargas útiles más pesadas, como ojivas nucleares.
Corea del Sur respondió a la prueba de misiles del régimen de Kim Jong-Un menos de tres horas después al disparar un nuevo misil balístico (SLBM) lanzado desde el submarino sumergido ROKS Dosan Ahn Changho de 3.700 toneladas, dijo el Ministerio de Defensa de Corea del Sur. El misil alcanzó su objetivo con precisión, dijo el ministerio sin dar más detalles.
Con el lanzamiento, Corea del Sur se convierte en el séptimo ejército del mundo en probar con éxito un SLBM, dijo el ministerio. Las otras naciones con SLBM también son potencias nucleares pero Corea del Sur no tiene armas nucleares.
La oficina presidencial dijo, en un comunicado, que la tenencia del SLBM es muy significativa en términos de garantizar la disuasión contra las amenazas omnidireccionales y se espera que desempeñe un papel importante en la defensa nacional autosuficiente y el establecimiento de la paz en la península coreana, en el futuro.
Actualmente, solo seis países -Estados Unidos, Rusia, China, el Reino Unido, Francia y la India- cuentan con SLBM con capacidades de operación de campo reales, los cuales tienen altos valores estratégicos y son difíciles de desarrollar.
Una declaración de la Agencia de Desarrollo de la Defensa de Corea del Sur también dijo que el país había logrado desarrollar un nuevo misil balístico capaz de transportar una ojiva más pesada y fuerte. El misil está diseñado para destruir estructuras de hormigón y túneles, dijo la agencia.
"Este misil balístico de alta resistencia aumentará la disuasión de nuestras fuerzas armadas en tiempos de paz y en crisis se utilizará como arsenal central para proyectar una respuesta abrumadora", dijo el Ministerio de Defensa.
El ministerio dijo que también se desarrolló un misil de crucero hipersónico diseñado para atacar barcos enemigos. El comunicado calificó al nuevo hipersónico como mucho más rápido que los misiles actuales en el inventario de Corea del Sur y dijo que pronto se desplegará con unidades militares.
