Los clientes serán notificados de
esto a través de todos los canales de comunicación de la línea aérea (correo electrónico,
SMS, sitios web) antes de su salida y se les pedirá que se aseguren de poseer
una o más máscaras para su viaje.
Esta nueva medida se suma a las
previamente implementadas por Air France, y sus socios, en respuesta a la situación
sanitaria ocasionada por el COVID-19, que incluyen:
- El uso obligatorio de un cubrebocas por parte de todos los miembros de la tripulación y personal en contacto con los clientes.
- El desarrollo del recorrido que realizan los clientes en tierra con la aplicación de la distancia física durante todo su paso por el aeropuerto y la instalación, siempre que sea posible, de protecciones de plexiglás en los aeropuertos.
- El establecimiento de una distancia física a bordo siempre que sea posible. En la mayoría de los vuelos, las bajas tasas de ocupación actuales permiten que los clientes viajen separados. En los casos en los que esto no sea posible, el uso de un cubrebocas por parte de todos los pasajeros y de la tripulación garantiza una protección adecuada de la salud.
- El refuerzo de los procedimientos diarios de limpieza de aeronaves, con desinfección de todas las superficies en contacto con los clientes, como reposabrazos, compartimientos o pantallas,
- El establecimiento de un procedimiento específico para desinfectar aeronaves periódicamente rociando un producto virucida aprobado cuya duración de efectividad es de diez días.
- El ajuste del servicio a bordo para limitar las interacciones entre clientes y miembros de la tripulación.Desde Paris - Charles de Gaulle, en vuelos domésticos, y vuelos hacia Europa, se suspenden los servicios de alimentos y bebidas. Para vuelos de larga distancia, el servicio en la cabina es limitado y se privilegian los productos empacados individualmente.
Conjuntamente, el aire a bordo se
renueva cada 3 minutos. El sistema de aire de los aviones de Air France está equipado
con filtros de aire particulado de alta eficiencia o filtros High Efficiency
Particulate Air (HEPA, por sus siglas en inglés), idénticos a los utilizados en
los quirófanos.
Estos filtros extraen más del 99,99% de los
virus más pequeños, incluidos aquellos cuyo tamaño no supera los 0,01
micrómetros, lo que garantiza la conformidad del aire de la cabina con los estándares
de calidad. Los virus de coronavirus, que varían en tamaño de 0,08 a 0,16
micras, se filtran mediante filtros HEPA.