Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) incluyeron en la lista de beneficiarios del acuerdo de paz a 25 capos del narcotráfico pedidos en extradición por Estados Unidos.
Los narcos, que están presos y de los cuales cinco son extranjeros, forman parte del listado de más de 14 mil rebeldes entregados por la dirigencia guerrillera al gobierno para acceder a los beneficios del pacto alcanzado en noviembre del 2016.
Tras informes periodísticos que daban cuenta de narcotraficantes colados en las listas de las Farc, la Oficina del Alto Comisionado para la Paz aclaró que no se han acreditado a estas personas.
El comisionado de paz, Rodrigo Rivera, reveló que con los análisis hechos junto con organismos judiciales y de inteligencia a más de 14 mil nombres, se llegó a la conclusión de que varios capos del narcotráfico, 25 en total, quieren colarse en la Justicia Especial de Paz para obtener las mismas concesiones que recibirán los integrantes de la guerrilla.
La entidad aclaró que "352 casos de personas que se encuentran bajo observación como resultado del proceso de verificación, pues existe información sobre su no pertenencia a las Farc."
“Nos pasaron la lista de nombres, unos 14 mil nombres hasta el momento, de ellos han sido certificados 11.200. Ya van como unos 350 nombres que hemos denominado ‘casos sensibles’ y creo que el Gobierno tiene dispuestos, con este comité técnico e interinstitucional, los mecanismos suficientes para evitar que se cuelen en la lista de acreditados esas personas que no pertenecen a las Farc“, señaló el comisionado de paz.
“Ya hay indicios e información judicial suficiente, de inteligencia, para crear dudas fundadas en torno a que esas personas no pertenecen a las Farc y por lo tanto no deben ser acreditadas y en esas condiciones no lo haremos”, añadió.
Según una investigación de la prensa local, los narcotraficantes presuntamente no eran miembros de la exguerrilla. Las autoridades investigan si los propios mandos recibieron millonarios pagos para incluir a estas personas en el registro, ya que con ellos podrían acceder a subsidios e incluso evitar la extradición.
Hasta el momento, las FARC han retirado a 160 personas del registro, entre ellas tres de los 25 capos, y las autoridades investigan a otras 352 personas, entre ellos varios extraditables, para asegurarse de que realmente integraron la exguerrilla. Otros 11 mil 200 han sido acreditados como miembros de la insurgencia.
A raíz de esta situación, el Gobierno Nacional anunció que se reforzará el mecanismo de verificación de los nombres que integran las listas de desmovilizados de las Farc que aspiran a comparecer ante la JEP y en los casos más sensibles se pedirá una intervención profunda de la Fiscalía y la Procuraduría.
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