La crisis económica venezolana tocó una de las áreas que habían permanecido indemne a esta problemática asociada a la caída del precio del petroleo, una moneda local escandalosamente devaluada y otros factores. La intensa compra de equipamiento militar que Venezuela venía haciendo para equipar a su Fuerza Armada Nacional se ha ralentizado hasta el punto que sus proveedores de armas han decidido suspender las entregas por falta de pago de parte del régimen chavista.
En esta ocasión el grupo suizo Ruag, propietario de la fábrica de aviones Dornier de Alemania, suspendió la entrega de siete aeronaves de transporte Do 228NG a Venezuela por falta de pago según informó el periódico suizo Tages Anzeiger.
Esta acción da por terminado el contrato celebrado en diciembre de 2013 entre el gobierno venezolano y la compañía europea y que contemplaba la entrega de 10 aviones de transporte Dornier 228 (dos usados y 8 nuevos) para la Aviación Militar Bolivariana.
De esos 10 aviones solo 3 alcanzaron a ser entregados cuando RUAG, debido a la falta de cumplimiento de los acuerdos por parte de Venezuela, decidió suspender el proceso de entrega.
Actualmente la compañía está ubicando los aviones destinados en un principio al país sudamericano en aerolíneas y operadores civiles europeos, mientras que Venezuela perderá el depósito que pagó de forma adelantada por los 10 aviones.
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