La Industria Militar de Colombia (INDUMIL), el consorcio público, fabricará a partir del 2010 una nueva versión mejorada del fusil de asalto Galil, una de las armas emblemáticas de las Fuerzas Armadas de Israel, así como cohetes aire-tierra, anunció el Ministerio de Defensa en un comunicado.
"En 2010 estarán en línea de producción los nuevos cohetes aire-tierra para la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) y el fusil Galil modelo Ace (7,62), que reemplazará la versión colombiana de una de las mejores armas de asalto del mundo", aseguró el coronel Carlos Villarreal, gerente de la industria militar (INDUMIL).
Estas armas tendrán una versión mejorada y conforme cálculos iniciales se producirán unas 45.000 unidades al año, tanto para abastecer a la tropa colombiana como para vender a ejércitos de otros países, en concreto a cuerpos de seguridad y militares del vecino Panamá, según el oficial citado en el comunicado. Según algunas informaciones locales, INDUMIL tendría derecho a utilizar el 50 por ciento de esta producción para la exportación y se afirmó que Israel ha cerrado ya un contrato de suministro de cerca de un millón de dólares (unos 2.000 millones de pesos)
Desde hace más de diez años, los miembros de las Fuerzas Armadas y de l Fuerza Pública colombianas utilizan el fusil Galil como arma de dotación oficial. Hace más de un año, el Gobierno inició negociaciones para lograr una transferencia completa de tecnología y los derechos para fabricar en su territorio el fusil bajo licencia para su venta en el continente americano. Colombia comenzó a utilizar este fusil en 1974 y comenzó a asumir su producción en fases a partir de un acuerdo firmado en 1994.
En América Latina el fusil Galil ha sido usado entre otros países por Honduras, Perú, Guatemala y Bolivia.Cada uno de los fusiles, que serán armados en la planta de INDUMIL denominada José María Córdova (en honor a un héroe de la independencia), se comercializa en 1,8 millones de pesos (unos 770 dólares al cambio actual), según algunas fuentes.Los analistas afirman que, según estudio militares, si el Ministerio de Defensa colombiano tuviera que reemplazar los Galil por un arma similar, esta tendría un costo cercano a los 5,5 millones de pesos (unos 2.353 dólares).
Actualmente las Fuerzas Armadas colombianas disponen de unos 300.000 fusiles Galil, cuya vida útil es de 10 años o su equivalente a 25.000 disparos, y su reposición y la de sus componentes es hecha totalmente por INDUMIL."Gradualmente obtuvimos la tecnología y la capacidad productiva para suplir las necesidades de nuestras fuerzas militares y de policía, pero hoy también tenemos la capacidad de atender mercados externos", señaló Villareal. En la planta de INDUMIL el ritmo de fabricación es acelerado. Además de fusiles se ha empezado a desarrollar también un lanzador individual de granadas (el IMC-40) que se acopla al fusil, producto ciento por ciento de ingeniería colombiana.
Autonomía suficiente
Entre tanto, el viceministro de Defensa para el Grupo Social y Empresarial de la Defensa, GSED, general (r) Fernando Tapias, declaró a periodistas que INDUMIL brinda autonomía suficiente para garantizar la defensa de la soberanía nacional."Somos autosuficientes en armas ligeras, municiones, explosivos y en otros sistemas de defensa que nos garantizan, al menos, poder enfrentar con recursos propios, todas las amenazas que afectan a Colombia", aseguró.
El comunicado no da más detalles sobre que tipo de cohetes aire-tierra fabricará INDUMIL pero en febrero pasado, el entonces ministro de Defensa Juan Manuel Santos afirmó que se estaba trabajando en el desarrollo de un cohete aire-tierra de 2,75 pulgadas para operar desde los helicópteros y aviones de la Fuerzas Aérea del país, sin develar cual es el tecnólogo del proyecto.
El comunicado no da más detalles sobre que tipo de cohetes aire-tierra fabricará INDUMIL pero en febrero pasado, el entonces ministro de Defensa Juan Manuel Santos afirmó que se estaba trabajando en el desarrollo de un cohete aire-tierra de 2,75 pulgadas para operar desde los helicópteros y aviones de la Fuerzas Aérea del país, sin develar cual es el tecnólogo del proyecto.