Corea del Norte aseguró este martes que había llevado a cabo con éxito su primera prueba de un misil balístico intercontinental, asegurando así un importante hito en sus esfuerzos por construir armas nucleares capaces de golpear a los Estados Unidos continentales.
El anuncio se produjo horas después de un lanzamiento el cual según las fuerzas militares de Estados Unidos, llevó el misil a una altitud de más de 2.800 kilómetros durante 37 minutos, lo que significa una mejora significativa frente a artefactos probados con anterioridad.
Este nuevo misil, del tipo Hwasong 14 tendría un alcance hipotético de 6.700 kilómetros en una trayectoria estándar, lo que colocaría a regiones continentales de Estados Unidos como el estado de Alaska bajo la amenaza nuclear del régimen de Kim Yong Un. Cabe resaltar que este rango no es suficiente para que atacar otras partes de Estados Unidos incluyendo los estados de la costa oeste o inclusive el estado insular de Hawaii.
El misil despegó del la base de Banghyon en la ciudad noroccidental de Kusong y voló en una trayectoria parabólica muy escarpada 578 millas antes de aterrizar en el mar entre Corea del Norte y Japón, informó el ejército surcoreano en un comunicado.
Aunque se cree que las fuerzas armadas coreanas ha logrado avances significativos en sus programas de armamento, los expertos creen que al régimen le queda todavía mucho camino por recorrer para lograr su objetivo miniaturizar las ojivas nucleares de misiles balísticos intercontinentales.
La prueba del misil agrega un nuevo elemento volátil a los esfuerzos de la administración de Trump para frenar las ambiciones nucleares de Corea del Norte, que han incluido ejercicios navales de la península coreana y presión sobre China, el aliado de vieja data de Pyongyang.
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