Dos bombarderos B-1B de EE.UU. sobrevolaron la península coreana este sábado en una demostración de fuerza tras los recientes ensayos de misiles intercontinentales norcoreanos, informó la Fuerza Aérea de Estados Unidos.
"Corea del Norte sigue siendo la amenaza más urgente para la estabilidad regional", afirmó en el mensaje oficial el general Terrence O'Shaughnessy, comandante de las Fuerzas Aéreas del Pacífico. "Si se nos llama, estamos listos para responder con una fuerza rápida, letal y abrumadora en el momento y lugar de nuestra elección".
En los ejercicios tomaron parte junto a los dos bombarderos estadounidenses cazas F-2 japoneses y F-15 de Corea del Sur. No es la primera vez que el Pentágono decide desplegar estos aviones, estacionados en su base aérea de Andersen en la isla de Guam, para exhibir músculo militar en respuesta ante lo que considera provocaciones por parte norcoreana.
Ya los envió a las inmediaciones de la península coreana tras el lanzamiento del misil intercontinental (ICBM) efectuado el pasado 4 de julio por el régimen de Kim Jong-un y a finales de mayo después de que Pyongyang disparase un proyectil de corto alcance.
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